Llega el verano y llevas meses con la “operación bikini”. Haciendo dietas imposibles, pasando hambre, y además, de crearte un mal estar general, te ha cambiado hasta el humor, ¿de verdad merece la pena?
Hacer una dieta no es dejar de comer, lo importante es llevar una alimentación saludable y equilibrada. Con las dietas de ayunos o similares solo conseguirás perder peso en poco tiempo, pero volver a recuperarlo enseguida. De esta manera, solo te crearás una frustración, y tú y yo sabemos que sin una mente sana no podremos tener un cuerpo sano.
Quiero ayudarte a que no te ocurra nada de esto. Con unos sencillos pasos podrás llevar una dieta saludable y pasar el verano luciendo cuerpazo, además de estar tranquila y a gusto contigo misma.
El primer paso es crear un menú equilibrado. Recuerda que lo más saludable es comer cinco veces al día, pero siempre eligiendo los alimentos adecuados. Además, lo mejor es hacer algo de ejercicio para combinarlo con una dieta saludable.
Empezamos con el desayuno. ¿Qué puedo desayunar? Unas tostadas con aceite de oliva virgen extra, un bol de yogur desnatado con avena, unas galletas integrales, un zumo de naranja natural o una infusión pueden ser algunas de las opciones. Recuerda no poner unas cantidades desorbitadas, si te comes, por ejemplo, dos tostadas y una pieza de fruta te quedarás genial.
Tu segunda comida del día es el almuerzo, si has tenido que madrugar, lo normal es que a media mañana te vuelva a entrar algo de hambre. Mi consejo es que tomes fruta, es fresca, tiene vitaminas como la A y la C, y minerales como el calcio o el potasio, y además, sacia el apetito. Puedes combinarla con unos frutos secos como nueces, avellanas o almendras. Están ricos y te dan los antioxidantes que necesita tu organismo.
Para la hora de la comida lo más saludable es evitar los fritos e intentar combinar los hidratos que aportan la pasta o el arroz por un lado y las proteínas que te dan las verduras, por otro. Puedes añadir también las legumbres, pero recuerda que lo más saludable es cocinarlas en ensalada o con verduras. Un consejo, si cocinas una carne o un pescado hazlo al horno, es mucho más saludable, y además, está igual de sabroso.
A media tarde, puedes volver a tomar un tentempié. Vuelve a tomar frutos secos. Puedes acompañarlos con un batido verde hecho de frutas y verduras (por ejemplo, con espinacas, kiwi y lima).
Por último, para la cena, lo más saludable para llevar una dieta equilibrada es comer ligero. Por la noche el metabolismo va más lento y hace que a tu organismo le cueste más trabajar. ¿Qué puedes tomar? Algo a la plancha como pescado o pollo, una ensalada de tomate natural o un revuelto de verduras.
¡Ya tienes el menú completo! Recuerda siempre antes de decidir entrar en una “operación bikini” hablar con un profesional para que te aconseje. Una dieta sana es una dieta equilibrada.