Total, ya desayuno en la oficina! Es una frase muy común últimamente. Debido a la falta de tiempo y las prisas, nos olvidamos de lo verdaderamente importante.
Pensamos que no tiene importancia pero realmente tiene más de la que creemos. Desayunar tranquilamente y dedicarle un espacio a disfrutar de un buen desayuno es fundamental ya que al despertar los niveles de azúcar en el cuerpo son muy bajos y se deben reestablecer para un buen funcionamiento de nuestro cuerpo.
Te aconsejo que no pase más de una hora desde que te despiertas hasta que tomas el desayuno, para que tu cuerpo pueda recuperar todos sus nutrientes y tenga un buen funcionamiento y rendimiento a lo largo del día.
Por supuesto ni me planteo la idea de no desayunar, ya que podríamos estar perdiendo fibras y vitaminas y cayendo en tomar cualquier snack no saludable.