Durante el embarazo es importante llevar una dieta equilibrada. Es beneficioso para tu salud como para el crecimiento y desarrollo del bebé. Incluir hábitos saludables es bueno durante todas las etapas de la vida, pero durante el embarazo puede ser una oportunidad para que esos hábitos empiecen y se queden en tu vida.
Cuando estás embarazada tu cuerpo cambia y tu organismo puede tener diferentes necesidades según como te sientas cada día. Si un día te levantas con náuseas o vómitos tendrás que pensar qué alimentos te favorecen a la digestión, por ejemplo, los alimentos cocinados al vapor o hervidos.
Por otro lado, cuando te quedas embarazada existen alimentos que son adecuados y otros que no debes comer:
¿Qué alimentos están recomendados durante el embarazo?
- Legumbres: son fundamentales para tu dieta ya que aportan fibra y son una fuente de proteínas de origen vegetal.
- Frutas y verduras: incluye diariamente 2 raciones de verduras y hortalizas. También es importante comer fruta puedes tomarla para desayunar, merendar o como postre.
- Cereales: el arroz, la pasta, el cuscús, los copos de avena o el trigo, aportan fibra, hierro y vitaminas del grupo B.
- Pescados: tomar pescado aporta grasas insaturadas omega-3 y otros nutrientes fundamentales para el desarrollo del feto.
¿Qué alimentos no debes comer durante el embarazo?
- Lácteos elaborados con leche cruda o sin pasteurizar: lee la etiqueta y asegúrate de que el producto no esté elaborado con leche cruda o sin pasteurizar. Los quesos rallados o en lonchas tampoco los consumas.
- Carnes crudas: no consumas carnes como el carpaccio o aquellas carnes que al corte liberan jugos.
- Productos cárnicos en lonchas y envasados: no tomes pavo cocido, jamón cocido, mortadela, fiambres ni comidas preparadas. Puede haber riesgo de infección por la bacteria Listeria monocytogenes.
- Productos cárnicos crudos curados: si no estás inmunizada frente a la toxoplasmosis (consulta con tu médico) no tomes chorizo, salchichón, jamón curado, etc.